Nuestro supervisor de laboratorios de computación, don Segundo Morales Toledo, se acogió a su jubilación. Antes de marcharse nos dejó esta bella carta de despedida que queremos compartir con toda nuestra comunidad. Agradecemos a Segundo por su compromiso, responsabilidad y su buen trato, especialmente con nuestros estudiantes y colegas. Sin duda, dejó una huella en nuestra facultad por su humildad, simpatía y amabilidad y siempre será parte de nuestra comunidad FCB. ¡Éxito en esta nueva etapa que comienza!
Estimados:
Junto con saludar me dirijo a ustedes para despedirme oficialmente. Como muchos de ustedes saben, hoy después de tantos años de trabajo le doy término a un camino lleno de esfuerzo, aprendizaje y anhelos, acompañado siempre de un equipo de personas muy humanas y profesionales en donde siempre primó la responsabilidad, solidaridad y compañerismo entre nosotros. Es por esto que sólo queda expresar mi gratitud a cada uno de ustedes, con quienes no solo tuve el privilegio de compartir años de trabajo, sino, momentos de alegría y dolor, siendo un gran apoyo en mi
diario vivir.
En mis recuerdos quedarán esas conversaciones en los pasillos, los alumnos estresados llegando antes de las 8 a imprimir en último momento diciéndome: «Tío me puede imprimir, por favor», y yo corazón de abuelita (como me decía nuestro ex colega Fernando) los atendía, las idas rápidas a la osteoteca, auditorio Lipschûtz y tanto más… son momentos que siempre llevaré conmigo.
No me queda más que agradecer su apoyo incondicional este último tiempo, sus muestras de cariño y su preocupación constante, no me cabe duda de que mi retiro de esta gran familia no es un adiós, sino un hasta pronto.
Les deseo un reparador descanso en estas vacaciones.
Un abrazo a la distancia,
Segundo Morales Toledo.
